La Virgen Roja es una novela gráfica ambientada en la Comuna de París de 1871; escrita y dibujada por el matrimonio Talbot, cuya colaboración ha dado otras obras como Sufragista o Lluvia. Narra los hechos vividos durante diez semanas en la ciudad de París, utilizando como hilo conductor la vida de Louise Michel, más conocida como la Virgen Roja.
La Virgen Roja
Educadora, revolucionaria, con gran capacidad oratoria, y profundamente feminista. Un cómic imprescindible para conocer uno de los hechos más infravalorados de nuestra historia contemporánea. La Comuna de París. La historia de un pueblo que durante diez semanas fue capaz de autogestionarse y sublevarse al orden establecido. Una historia de suma relevancia, pero con trágico final; un cómic feminista altamente recomendable.
La historia nos la cuenta Monique, una joven intelectual cuya madre fue educada por Louis Michel en la escuela para pobres. Monique recibe a la escritora feminista estadounidense Charlotte Perkins Gilman. Y es a esta a quien le cuenta la vida de la Virgen Roja; y con ello, la historia de la Comuna.
Los antecedentes
La Primera Internacional
La Primera Internacional (AIT) fue fundada en Londres en 1864, constituyéndose como una asociación que agrupaba a sindicalistas, anarquistas y socialistas de diferentes países europeos, con el objetivo de organizar la acción proletaria del mundo occidental. Un foro por el que pasaron las personalidades del momento tales como Engels, Marx o Bakunin. Un lugar en donde uno de los textos más significativos fue el Manifiesto Comunista. Uno de los mayores hitos de la I AIT fue la creación de la Comuna de París en 1871, un movimiento insurreccional que tuvo lugar en París entre marzo y mayo de dicho año, y que supuso la instauración durante esos meses de un régimen político popular, republicano y autogestionario vinculado con el anarquismo y el socialismo.
Napoleón III
Carlos Luis Napoleón Bonaparte, más conocido como Napoleón III, fue el único presidente de la II República francesa, que tuvo lugar entre 1848 y 1852. Y posteriormente se convirtió en emperador de Francia entre 1852 y 1870. Sobrino de Napoleón Bonaparte, ejerció el poder de manera autoritaria. Una mezcla entre nacionalismo expansionista que le llevó a conquistar numerosos territorios en África y Asia, como Vietnam y Laos; y tradicionalismo conservador y autoritario. Su gran rival político fue el canciller prusiano Otto von Bismarck. Finalmente, Napoleón III sería derrotado en la batalla de Sedán frente a Prusia. Acabando secuestrado el emperador.
En París, los diputados electos se autodeclaran gobierno de Defensa Nacional con León Gambetta a la cabeza. Y proclaman a los pocos días la III República; deponiendo así al emperador. Esta situación no gustó en Prusia, que apoyados por parte del ejército de Francia, sitiaron la ciudad parisina; e instaron al ejército francés a cargar contra el pueblo de París y su Guardia Nacional. Sin embargo, se negaron. Es preciso dejar constancia de que la Guardia Nacional se creó sobre todo con aportaciones populares, y su sueldo era ínfimo. Y a todo esto se hace mención en el cómic.
La Comuna de París
Pero la situación no mejoró para las clases populares, y el 18 de marzo de 1871 estalló un conflicto en Francia, que dio origen diez días más tarde a la conocida Comuna de París. Un movimiento fraguado entre la Guardia Nacional y el pueblo. Que echó a los terratenientes de la capital francesa. Fue la primera experiencia de un gobierno socialista en Europa; instaurada con la integración del proletariado, aunque con determinados líderes que apostaban por la proclamación de la III República francesa.
El carácter espontáneo de este movimiento ayudó en la construcción de una sociedad que cuestionaba el poder socialista. Se podría decir que el sentir popular levantó a la Comuna de París. Y por ello, hoy día se considera uno de los hechos más memorables de nuestra historia contemporánea
La Virgen Roja
Con la proclamación de la Comuna, el papel de Louise Michel cobra protagonismo. Entre las aspiraciones de la Virgen Roja estaban abrir una escuela pública en la iglesia de St. Pierre; crear una cooperativa de costureras; montar una guardería gratuita; o racionar el reparto de comida. Asuntos que iban todos dirigidos hacia las mujeres, y hacia las clases más desfavorecidas.
En sus discursos desde el púlpito de la iglesia defendía la escuela laica; rechazaba el matrimonio como institución de opresión a la mujer; afirmaba la absoluta igualdad de hombres y mujeres, y en particular, el mismo derechos de niños y niñas a estudiar lo que quisieran; y defendía su visión utópica de la sociedad. Un discurso más cercano a los postulados marxistas que al anarquismo. En una época en donde ambas corrientes no se encontraban enfrentadas.
¿Qué hizo la Comuna de París?
Durante setenta y dos días, la Comuna de París orquestó todo un programa de reformas revolucionario:
- Nacionalizar la industria.
- Los talleres pasaron a ser cooperativas.
- Los obreros se hicieron cargo de las fábricas.
- Las deudas atrasadas se cancelaron.
- Se organizó la distribución de alimentos.
- Requisaron casas vacías para las personas sin hogar.
- Se impulsó la creación de escuelas laicas.
Aunque la Comuna también llevó a cabo un programa de represión. Y no solo de personas, sino de patrimonio material y artístico de París.
Esto supuso que edificios como el Palacio de las Tullerías o el Palacio de Orsay, fueran pasto de las llamas. Llevándose consigo documentación y patrimonio de incalculable valor. Unos daños al patrimonio histórico que todavía hoy día tienen que sufrir los historiadores que se tienen que enfrentar a la quema de archivos de la capital parisina durante estos días.
El fin de la Comuna de París y la Virgen Roja
A finales de mayo, la ofensiva contrarrevolucionaria arrasó la Comuna. Más de 30.000 personas perdieron la vida. Y la Virgen Roja fue detenida y llevada a Consejo de guerra. Y aunque ella quería ser ejecutada, finalmente la deportaron a Nueva Caledonia.
Allí siguió su modelo de vida, defendiendo y ayudando siempre a los más necesitados. A los más desfavorecidos. Ignorando lo conveniente o lo políticamente correcto. E incluso confabulando con los indígenas y en contra de los propios colonos franceses, a los que consideraba explotadores.
Con el tiempo todos los comuneros consiguieron la amnistía del gobierno francés, y pudieron regresar a casa. Pero tras su vuelta, la Virgen Roja no desistió. Se mantuvo fiel a sus sueños, utopías, esperanzas e ideas de futuro. Louise Michel siguió entrando y saliendo de la cárcel como consecuencia de su actividad política. Con unas ideas que ya eran más cercanas a la bandera negra del anarquismo que al propio socialismo. Y ni un intento de atentado que a punto estuvo de costarle la vida consiguió que actuara de otro modo.
Datos de interés que aparecen en La Virgen Roja
Además de las referencias obvias del imperio de Napoleón III y su conflicto con Prusia, y la propia Comuna de París; existen otros elementos realmente interesantes y que se dejan ver a través de las páginas de la novela:
- La construcción de la torre Eiffel.
- La exposición universal de París en 1889.
- La celebración del primer centenario de la Revolución Francesa de 1789.
- El auge de la literatura científica, especialmente Julio Verne.
- La masacre de San Petersburgo de 1905, conocida como Domingo Sangriento.
- La Marselleise como símbolo de unidad nacional.
- Costumbres de ocio de la época como el teatro de sombras.
Un excelente trabajo de documentación
En resumen, una obra IMPRESCINDIBLE. Tanto desde el punto de vista estético, como por el guión. Una obra idónea para recomendarla a nuestros alumnos. Con un excelente trabajo de documentación, como demuestran sus dos páginas de fuentes, y las numerosas referencias históricas que se compendian al final de la obra de cada una de las páginas de la novela.
En este glosario de anotaciones se hace referencia a la autoría de muchas de las citas que se leen en la obra; se recogen pequeñas fichas biográficas de algunos de los personajes que se suceden por sus páginas, como la estadounidense Charlotte Perkins; también se hacen precisiones históricas; y se recogen datos sobre las diferentes obras literarias que se citan a lo largo de la novela. Una lectura sobresaliente que te hará sin duda querer saber más sobre la Comuna de París. Como punto negativo de la obra, la trama en algunas partes resulta enrevesada y dificulta mucho su lectura.
Larga vida a la Comuna.
- La Virgen Roja (The Red Virgin)
- Mary M. Talbot y Brian Talbot
- Traducción: Lorenzo Díaz
- La Cúpula
- 2018 (1ª edición, 2016)
- 18,90€