Concepción Arenal fue una pensadora española nacida en Ferrol. Pero no fue una pensadora cualquiera. Se trata de una de las máximas representantes femeninas del realismo literario junto a Emilia Pardo Bazán. Siempre defensora de los derechos de las mujeres, y preocupada por la miseria y la mendicidad, Concepción Arenal fue una de las mentes más brillantes de su época. El cómic La mujer del retrato es un justo homenaje a su infancia y adolescencia; que lo firman Mónica Rodríguez como guionista, y Teresa Novoa como dibujante. Esta última, a su vez, es tataranieta de Concepción Arenal. De este modo, le rinde un merecido homenaje a su antepasado, con un dibujo exquisito, del que nos hacemos eco en TBO en clase.
Concepción Arenal
El 31 de enero de 1820 nació en Ferrol Concepción Arenal. Su padre, Ángel Arenal, liberal, tuvo que refugiarse en San Salvador de Leiro tras el fracaso del llamado Trienio Liberal en 1823. No fueron tiempos fáciles para los liberales como su padre. Y aunque pronto llegaron tiempos mejores, su padre no llegó a verlos. Enfermó a causa de su paso por las cárceles, y terminó falleciendo. Concepción Arenal nunca se repuso completamente de esta pérdida.
Tras la muerte de su padre, Concepción se trasladó con sus dos hermanas y su madre a Ponte, donde vivía su abuela paterna. Y años más tarde se trasladaron a Madrid, en donde recibió una educación acorde con los estándares de feminidad de la época. Sin embargo, la condición intelectual de Concepción Arenal siempre fue superior a la sus contemporáneas. Desde su infancia había devorado libros de poesía, filosofía y literatura; se había preocupado por la historia, las humanidades y las ciencias. No respondía a los estándares femeninos de su época, y eso le hizo apartarse de la sociedad. Se distanció de su madre y se fue a vivir con su abuela materna.
Tras el fallecimiento de su abuela primero, y de su madre después, Concepción Arenal se casó con el abogado Fernando García Carrasco, con quien tuvo tres hijos. Y tras su muerte se trasladó primero a Potes, y luego a Madrid. Vivió una vida dedicada a la cultura, la escritura y la lectura. Estudió derecho vestida como un hombre. Trabajó en comedores sociales. Y vivió su vida muy ligada al catolicismo. Una de las primeras feministas de España, a la que se le han dedicado varias calles y monumentos por toda España. Y ahora también un cómic, La mujer del retrato, que hace un digno homenaje a su figura.
La mujer del retrato, Concepción Arenal
Mónica Rodríguez y Teresa Novoa nos ofrecen un maravilloso retrato de la vida de Concepción Arenal desde su más tierna infancia en San Salvador de Leiro, y hasta la muerte de su madre; cuando Concepción contaba ya con veintiún años. La obra recrea la ficción de como pudieron ser esos primeros años de la vida de una de las mentes más brillantes de la España del momento. Lo hace con documentación y conocimiento, como se deben hacer los cómics. Y el resultado es magnífico. En parte la obra pretende erradicar la imagen de seriedad y severidad que habitualmente se asocia a la imagen de Concepción Arenal. Y lo hace escarbando en esa otra imagen, la de Concepción niña que se cuestionaba los principios sociales de la época y se enfrentaba al machismo imperante; al mismo tiempo que no refrenaba su voraz apetito por la lectura.
Un cómic en el que cada viñeta y cada página imaginada por Teresa Novoa, nos acerca más a Concepción Arenal; y nos permite realizar una inmersión en el mundo de una joven que años más tarde se convertiría en uno de los principales referentes de la defensa de la intelectualidad de las mujeres. Sin duda, una obra imprescindible para entender quién fue Concepción Arenal.
Los cómics y su enfoque didáctico
La mujer del retrato es uno de esos cómics en donde el interés didáctico es destacable. Un cómic que nos sirve tanto para ver una figura notable del feminismo español; como para abordar determinados contenidos de nuestra historia contemporánea. Y es que las autoras muestran una gran preocupación por insertar a Concepción Arenal en su contexto histórico, y lo hacen de forma excelente. Así se mencionan las guerras carlistas que hicieron de precedieron al liberalismo tras la muerte de Fernando VII. Las persecuciones y el exilio al que fueron sometidos los liberales tras el Trienio Liberal. Lo cambios sociales e ideológicos que se dieron en la primera mitad del siglo XIX. O las tertulias, cafés y casinos en los que se debatían las nuevas ideas. Sin dudas, un cómic que nos sumerge en la primera mitad del siglo XIX y que cuida hasta el más mínimo detalle.
- La mujer del retrato. Concepción Arenal
- Mónica Rodríguez (guion); Teresa Novoa (dibujo)
- Prólogo de Manuela Carmena (Puedes leer el prólogo pinchando aquí)
- Nórdica Cómics
- 2021
- 22,50€