El secreto del espadón es la primera historia de Las aventuras de Blake and Mortimer. Publicado originalmente en 1947, la obra es fruto de su época, y como tal, hoy día es posiblemente la historia más lenta de la serie. El dibujo es espectacular, en ese aspecto poco debate puede haber. Edgar P. Jacobs era un virtuoso del dibujo, a años luz de muchos de sus contemporáneos. La ambientación propia de la Guerra Fría es un documento histórico en sí mismo. El álbum muestra claramente un mundo dividido en bloques, en el que el capitalismo y el comunismo emergente se enfrentaban en múltiples escenarios, irreales en este caso, pero bastante lógicos. Y por supuesto, el cuidado que tiene el autor en cada uno de los detalles es impresionante. Ya sean los paisajes, la ropa o el armamento.
Sin embargo, y pese a todo ello, la historia es realmente lenta, predecible, y en buena medida, puede resultar aburrida. Pero sin duda los pro superan a los contras. Sobre todo cuando recordamos que El secreto del espadón no es más que el inicio de una saga exuberante, y resulta absolutamente imprescindible de leer para cualquier amante de los cómics clásicos.
El secreto del espadón
En el mundo entero se multiplican los pactos y conferencias destinados a salvaguardar la paz y defenderla de la hostilidad del misterioso “Imperio Amarillo” de Basam Damdu, emperador del Tíbet. Pero todo parece quedar en nada cuando lanza una ofensiva mundial, y en pocas horas arrasa las principales ciudades del planeta: París, Londres, Roma o Bombay quedan reducidas a cenizas.
Sin embargo, en la base militar de Scaw-Fell, en Inglaterra, el profesor Mortimer está desarrollando un arma secreta cuya potencia de fuego debería permitir contrarrestar la progresión meteórica del ejército “amarillo”. Se trata del famoso Espadón. La última esperanza de la humanidad contra los ataques del Emperador Basam-Dandu. Y Phillip Mortimer es el único que posee su secreto.
Informado por sus espías, Olrik, al servicio del Usurpador, ataca la base con su flota aérea. El Capitán Blake, del Servicio de Inteligencia, y el Profesor Mortimer huyen a bordo del Golden Rocket, llevándose consigo los planos del Espadón. Comienza entonces una fantástica persecución entre Olrik, que quiere recuperar los planos, y Blake y Mortimer, que intentan unirse a una organización secreta para completar con éxito la construcción de la máquina que representa la última esperanza del mundo libre: el Espadón.
Luces y sombras de un álbum mítico
Totalmente comprensible para la fecha en la que se edita el cómic, pero El secreto del espadón contiene numerosos errores desde el punto de vista tecnológico y científico. Empezando por las bombas atómicas, de las que solo menciona su poder destructivo pero nada de la radiación. Y terminando por el propio Espadón, capaz de realizar unos movimientos totalmente imposibles para un avión, que además es anfibio.
Aunque se debe poner en contexto, destaca también el fuerte componente racial presente en la obra, en la que se habla directamente de Imperio amarillo, atribuyéndoles una características. Esa idea del peligro amarillo para referirse a la amenaza de los pueblos de Asia Oriental fue usada como excusa y pretexto para el trato político, económico y militar de occidente como ya vimos en Tintín y el Loto Azul. Y en parte alimentada por los propios pueblos orientales. Una visión claramente eurocentrista, inspirada en el desconocimiento y la desconfianza hacia el mundo oriental.
- El secreto del espadón (Le secret de l´Espadon)
- Edgar P. Jacobs
- Traducción: Alfred Sala
- Rotulación y diseño: Rocío Vargas
- Extras de Antonio Altarriba y Jorge García
- Norma Editorial
- 2024 (publicado originalmente en 1947)
- 45,00€
