La editorial Norma ha sacado una edición integral de la etapa de Hugo Pratt y H. G. Oesterheld al frente de Ernie Pike, entre los años 1957-1961. Una oportunidad excelente para leer una obra maestra atemporal. Una de las mejores novelas gráficas que se ha hecho sobre el género bélico y que hasta ahora no habíamos tenido la oportunidad de disfrutar en España en una edición integral. La edición viene acompañada de un magnífico artículo introductorio de Dominic Petitfaux, sin duda, el mayor especialista en la obra de Hugo Pratt.
La intrahistoria de Ernie Pike es compleja. El éxito de la serie fue tal que al poco de que Hugo Pratt (Corto Maltés) y Oesterheld (El Eternauta) la iniciaran, Pratt hubo de compartir su función con otros dibujantes, porque no le daba tiempo. Y cuando Pratt se marchó a Europa, Oesterheld siguió guionizando capítulos de Ernie Pike con otros dibujantes como Mario Bertolini o Jorge Moliterni. Esta decisión no fue del agrado de Hugo Pratt, que en su periplo por el viejo contienente, se dedicó a difundir su parte de Ernie Pike, sin citar a Oesterheld como guionista. Obviamente se palpaba la tensión entre ambos. En cualquier caso el tiempo terminó con la fricción. Sobre todo tras la trágica desaparición de H. G. Oesterheld víctima de la dictadura argentina.
Ernie Pike
Esta edición integral del Ernie Pike, de Hugo Pratt y Oesterheld, quizás no sirva para reivindicar la trayectoria total de un personaje del que se estuvo escribiendo hasta 1976. Pero sin duda, rescata las 34 historias en las que coincidieron ambos autores. Y que por descontado, es la parte más interesante del personaje.
Ernie Pike es un corresponsal de guerra durante la segunda guerra mundial. Un testigo directo del horror y la barbarie de la guerra. Un reportero capaz de encontrar el lado humano dentro del horror de la guerra; independientemente del bando en el que se encuentre. Aunque lo llamativo es que el reportero Ernie Pike solo sale en 21 de las 34. Y es que no es en realidad el protagonista de las historias. No pasa de ser un personaje secundario, un mero narrador.
Se trata de una obra con un sentido claramente optimista con la naturaleza del ser humano. Un cómic muy alejado de la épica habitual de los escenarios bélicos. Aquí no hay héroes. No hay victorias. Tampoco derrotas. Solo hombres luchando por huir de la muerte, en medio de situaciones muy alejadas de la gloria. Pratt y Oesterheld se alejan así de los patriotismos baratos, y presentan una obra única en su género.
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Un cómic muy humano
Un cómic amargo en el que la muerte siempre está presente. Historias muy humanas en un contexto de guerra, en las que difícilmente encontraremos un final feliz. Los actos heroicos en Ernest Pike no son grandes hazañas. Un partisano y un francotirador que mueren al enfrentarse a los alemanes por no dejar al margen sus rencillas personales por el amor de una mujer; un soldado africano que le corta la cabeza a un general japonés para honrar la muerte de su amigo en el frente; el hundimiento de un submarino alemán que llevaba consigo civiles italianos rescatados del mar; o el soldado japonés que finge tener la tecnología que repele las armas para mostrárselo a los enemigos que le han capturado y morir limpiamente sin ser torturado. Ernie Pike es capaz de rascar y encontrar la humanidad dentro de la inmundicia.
El virtuosismo narrativo del cómic está presente en cada uno de sus capítulos. Y algunas de las viñetas son verdaderas obras de arte dignas de ser expuestas en las paredes de cualquier museo. Sin duda, Ernie Pike es un regalo perfecto para cualquier amante de los cómics.
- Ernie Pike (integral)
- Hugo Pratt (dibujo); H. G. Oesterheld (guión)
- Norma
- 2020
- 49,95€