El cómic de Alicia Vallina y María Pedrosa nos presenta la biografía de Isaac Peral; a quién se le atribuye la invención del primer submarino. Sin embargo, no resulta fácil acotar la autoría de la invención del submarino. Ya desde la época moderna se tiene constancia de los primeros intentos de poder navegar sumergidos en el agua. En los siglos XVI y XVII tenemos los primeros registros de sumergibles; como el del español Jerónimo de Ayanz y Beaumont en el año 1600. En la guerra de la independencia norteamericana vimos el Turtle, con capacidad para una sola persona. Y en 1861, antes de que Isaac Peral presentase su proyecto, en las aguas de los EEUU navegaba el USS Monitor. Un barco parcialmente sumergido equipado con torres y cañones; y que se vio en acción en la batalla de Hampton Roads.
Queda claro que el submarino de Isaac Peral no fue el primer vehículo acuático que realizó exploraciones subacuáticas. Aunque sí se le atribuye la autoría del primer submarino funcional de la historia; ya que los anteriores proyectos no pasaron de los primeros ensayos y probaturas. El submarino construido en La Carraca, Cádiz, pasó a la historia como el primer submarino. La botadura oficial tuvo lugar el 8 de septiembre de 1888, en el Arsenal gaditano. Y el cómic que nos ocupa narra en buena medida todo el proceso de su creación, en torno a la biografía de Isaac Peral.
Isaac Peral
El cómic nos cuenta desde el nacimiento de Isaac Peral en Cartagena, el 1 de junio de 1851. Y hasta su muerte el 22 de mayo de 1895, a los cuarenta y cuatro años. Una mente brillante que murió joven víctima de un cáncer de piel; y después de muchas operaciones. Ingresó desde muy joven en la Armada española emulando los pasos de su hermano mayor y de su padre. Y tuvo una carrera meteórica ascendiendo muy rápidamente gracias en parte a su participación en la guerra de los diez años en Cuba, y la tercera guerra carlista.
En 1877 tras sus primeros destinos en primera línea, ingresó como estudiante en la Academia de Ampliación de estudios de San Fernando. Y en 1885 presentó ante dicha Academia su primer proyecto de un submarino con propulsión eléctrica, que fue aprobado. Isaac Peral había hecho realidad su sueño. Contaba con hombres y presupuesto para construir el submarino que tenía diseñado. Y aquello que parecía una locura se hizo realidad apenas tres años después.
Sin embargo, como suele ocurrir en la historia, España no trata bien a sus genios. Isaac Peral se encontró de frente con la política, la jerarquía militar y la prensa. Y terminó sus días apartado de su propio proyecto.
Un proyecto de investigación en formato cómic
Alicia Vallina demuestra con este cómic una vez más algo que en TBO en clase defendemos desde nuestro inicio: el cómic puede ser un excelente resultado final de un trabajo de investigación. Muy lejos del libro, o del artículo en revista especializada, el cómic tiene una connotación negativa que muchas veces provoca ser rechazado como un estudio científico o serio. Pero cómics como este demuestran qué equivocados están aquellos que desprecian el cómic.
Mención especial a la interesante portada realizada por María Pedrosa. Autora sevillana que ya vimos con anterioridad a cargo del color en 1937. Los niños de la guerra; salida de esa extraordinaria cantera de autores que es la editorial Carmona en Viñetas. Así como al detalle de incluir a la propia autora del cómic, Alicia Vallina, en las viñetas finales. También se agradece mucho que el cómic incluya parte del ostracismo al que fue sometido el invento de Isaac Peral desde su muerte a fechas más recientes. De carne para desguace, el submarino descansa hoy en el Museo Naval de Cartagena.
- Isaac Peral
- Alicia Vallina (guion); Maria Pedrosa (dibujo); Ana Melendo (asistente de color); Javier Sanmateo Isaac Peral (prólogo); Alicia Vallina (contenido extra)
- Cascaborra Ediciones
- 2021
- 16,00€
Me encanto demasiado tu página Gracias, Un saludo