Simón Radowitzky. 155

Simón Radowitzky fue un ucraniano judío del imperio ruso, militante anarquista, que desde muy joven emigró a Argentina por causas políticas. Se marchó de Rusia huyendo de los cosacos de la Rusia de los zares y llegó a Argentina en donde empezó a trabajar en una fábrica. Pero pronto se vio mezclado con los conflictos de los obreros, las manifestaciones y las huelgas. En noviembre de 1909, Radowitzky preparó un atentado y asesinó al político y jefe de la policía de Buenos Aires Ramón Lorenzo Falcón; por lo que ingresaría en la prisión de Ushuaia durante 21 años. Allí tuvo que aguantar torturas, violaciones y vejaciones. Cuando Simón Radowitzky salió, otro mundo diferente le esperaba. Su militancia le llevaría a participar posteriormente en la guerra civil española, y acabaría sus días en México. Toda una vida luchando por la justicia desde sus ideales anarquistas.

El cómic 155. Simón Radowitzky, del autor argentino Agustín Comotto parte de la lectura de la novela La vida por un ideal de Augustin Souchy, amigo personal del propio Simón Radowitzky. Sin embargo, como el propio Comotto señala, para llevar a cabo el cómic tuvo que agregar personajes, inventar situaciones y especular con los puntos más oscuros de la biografía de Radowitzky. Y aunque la mayor parte de lo que se relata en el cómic es verídico, hay puntos importantes en la trama como el personaje de Lyudmyla, que fueron fruto de la imaginación de Comotto. Un punto importante a tener en cuenta a la hora de valorar el relato, ya que en el cómic Lyudmyla tiene un peso fundamental en la personalidad de Radowitzky.

155. Simón Radowitzky

155. Simón Radowitzky es un cómic de esos difíciles de digerir y que durante un tiempo se te quedan en la cabeza. La obra de Agustín Comotto está dividida en tres arcos diferenciados. En el primero nos traslada a la cárcel de Ushuaia. Allí transcurre la mayor parte del relato, y nos transmite el sufrimiento que experimentó Simón encerrado en la prisión más austral del mundo, en la Tierra del Fuego. Una cárcel que estuvo operativa entre 1904 y 1947 y que se caracterizó por sus duras condiciones. Allí recibió constantes torturas, largos aislamientos, y más vejaciones que ni tan siquiera son trasladas al cómic como las violaciones. Fue privado de todos sus derechos básicos, y solo su determinación y sus ideales le permitieron no perder la cordura.

Simón Radowitzky

Al mismo tiempo, Comotto nos introduce a través de flashbacks pequeños relatos de su infancia en la Rusia de los zares, lo que nos permite leer referencias al hundimiento de los barcos rusos en Porth Arthur; la opresión del régimen de los zares y el nacimiento del movimiento obrero; los progromos; la aparición de los soviets; interesantes detalles de la cultura judía; o los incidentes del Domingo Sangriento, que lejos de ocurrir solo en San Petersburgo, fueron simultáneos en varias ciudades.

De Ushuaia a la guerra civil española

El segundo arco de la serie sigue transcurriendo en la cárcel de Ushuaia, pero en esta ocasión los flashbacks nos trasladan a Argentina, y nos van a contar cómo entró Simón Radowitzky en la cárcel y se convirtió en el prisionero 155. Buenos Aires se convirtió en el lugar al que llegaban todos los expulsados de la Tierra. Y allí Radowitzky hizo justicia por los muertos en los progromos a manos de los cosacos rusos, por los muertos en la plaza de Yekaterinoslov, y por los muertos en la plaza Lorea. Tomó el camino de la venganza y acabó con sus huesos en la cárcel de Ushuaia durante 21 años. También conoceremos algunos datos familiares relevantes, como lo que le ocurrió a su hermano mayor demente.

anarquismo y guerra civil
Uno de los momentos más trágicos, cuando se entera de que su hermano está en paradero desconocido.

Finalmente, en el tercer arco, el más breve, vemos a Simón Radowitzky fuera de la cárcel, y poniendo rumbo a España para luchar contra el fascismo en plena guerra civil española; emulando a lo que hicieran otros brigadistas. La Brigada Lincoln, Orwell o No pasarán son buenos ejemplos del papel internacional que tomó la guerra civil española en la lucha contra el fascismo.

Simón Radowitzky, mito anarquista

Agustín Comotto nos ofrece una buena historia, respetuosa con los acontecimientos históricos, bien documentada, y que atrapa al lector y le lleva a reflexionar. ¿Hasta cuándo puede un hombre resistir por sus ideales? Radowitzky luchó buena parte de su vida por dejar de ser el mito en el que nunca quiso convertirse. Un relato emotivo y complejo, con un dibujo muy expresivo en blanco y negro con pequeños detalles en rojo que nos llevan por un viaje a través de los ideales anarquistas de un hombre que solo quiso luchar por un mundo más justo. Una trepidante historia de injusticia. Una lectura que difícilmente olvidarás.

Simón Radowitzky

Puedes leer aquí las primeras páginas del cómic.

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