El libro de las bestias

Ramon Llull fue un filósofo, místico, teólogo, poeta y misionero mallorquín nacido a finales del siglo XIII. Una figura destacada en la Edad Media al que se le atribuyen contribuciones significativas en varios campos, y del que Cascaborra edito recientemente un cómic. Además de sus estudios filosóficos y literarios, Llull fue también un activo misionero cristiano que intentó convertir a musulmanes al cristianismo, a menudo enfrentándose a la oposición y el peligro. Su vida y obra han dejado un impacto duradero en la historia intelectual y espiritual de la Edad Media. Entre sus obras más destacadas está El libro de las bestias, un relato inserto dentro de una obra mayor, El libro de las maravillas, y que Pep Brocal adapta en formato cómic, desde el máximo respeto a la obra original, pero con lógicos cambios.

La obra utiliza la alegoría y la metáfora para representar las diferentes pasiones y vicios humanos. Se trata de una obra original que utiliza de forma alegórica a los animales. Cada bestia simboliza un aspecto negativo de la naturaleza humana, y el libro explora la lucha interior del ser humano para superar estos aspectos negativos y buscar la virtud. El libro fue un regalo al rey Felipe IV de Francia, Felipe el Hermoso, con el objetivo de mostrarle el camino hacia la virtud que debía tener un buen gobernante. Una obra similar al estilo de El Príncipe de Maquiavelo.

El argumento del cómic, sacado directamente de la obra original, es relativamente sencillo. Un león congrega a una gran cantidad de animales para votar quién va a ser el rey, saliendo victorioso. Sin embargo, el león deja fuera de su corte al zorro. Éste, utilizando su inteligencia, logrará manipular al resto de animales hasta lograr ocupar el puesto en la corte del que se cree merecedor. En este punto, Pep Brocal sí hace una modificación fundamental al cambiar el zorro por una zorra. Y también reduce el número de microrelatos dentro de la propia obra, que aunque funcionan perfectamente como moraleja, acabarían cansando al lector del cómic.

La obra es una sátira de cómo el poder hace uso de las manipulaciones, el engaño y las mentiras. Y aunque los actores de la obra son animales, se trata de una historia muy humana y absolutamente nada infantil. Una magnífica radiografía humana, con numerosas lecturas, y que calza perfectamente para trabajar en educación secundaria los valores. Y respecto al apartado gráfico, visualmente el cómic es muy atractivo, y la edición de Bang Ediciones simplemente magnífica, con una portada desplegable que hará las delicias de los aficionados.