Spirou y Fantasio es una obra clave del cómic europeo. Uno de los buques insignia de la Bande Dessinée. Autores de la talla de André Franquin, Jijé, Tome, Janry o Munuera, se han puesto en un momento u otro al frente de la serie; convirtiéndola casi desde sus primeros años, en la serie más emblemática del mercado francobelga. Una serie que sido editada en diferentes ediciones, destacando los integrales de la editorial Dibbuks. Una edición publicada por estricto orden cronológico, y que permite asistir al proceso de creación de una de las obras más importantes de la historia del cómic. A continuación podrás disfrutar de un análisis por autores que hemos realizado desde TBO en clase. Esperamos sus comentarios.
Spirou y sus autores
Franquin
(ver artículo dedicado a Franquin)
Jean-Claude Fournier
(ver artículo dedicado a Fournier)
Nic Broca
(ver artículo dedicado a Nic Broca)
Tome y Janry
Con el dibujo de Jean-Richard Geurts (Janry), y los guiones de Philippe Tome (Tome), Spirou volverá a vivir una etapa estable y longeva que se prolongará durante más de una década. Un renacimiento de los personajes, que algunos considerarán una etapa dorada; y que supondrá la etapa más gloriosa en cuanto a ventas se refiere. Nunca antes Spirou fue tan vendido ni tan leído. Obviamente algo de responsabilidad tendrá este tándem.
Dignos herederos
Tome y Janry llegaron a la redacción de la revista Spirou con poco más de veinte años para encargarse de una sección de pasatiempos que llamaron Jeureka, y a la que dotaron de vida propia.
Por aquel entonces, Fournier ya había anunciado su intención de abandonar la serie de Spirou y Fantasio y se buscaba sucesor. El dibujante designado fue Nic Broca, sin apenas experiencia previa en Bande Desinée, procedente del mundo de la animación. Siendo acompañado del guionista Raoul Cauvin (Casacas Azules). Entre 1980 y 1983 se haría cargo de la serie, y al mismo tiempo, Tome y Janry se iban haciendo un hueco hasta que recibieron el encargo de realizar su primera historia para Spirou. Y lo que nunca antes imaginaron que pudiera ocurrir, terminó sucediendo.
El 18 de junio de 1981 publicaron el primer relato de Tome y Janry, La voz sin amo. Todavía faltaría mucho para que se convirtieran en los autores principales de la serie, pero ya podían presumir orgullosos de haber contribuido con sus ocho páginas al maravilloso mundo de Spirou y Fantasio.
El estilo de Tome y Janry
Pese a las constantes referencias al universo de Franquin, la principal característica del estilo de Tome y Janry es que fueron capaces de crear un estilo propio reconocido por los lectores. Ambos cogieron perfectamente el tono a la serie, y fueron capaces de darle una impronta personal. Y es que el primer reto importante de Tome y Janry al frente de la revista fue intentar que los personajes que llevaban décadas funcionando en la serie evolucionaran lo suficiente como para encandilar a las nuevas generaciones; manteniendo así la frescura de la serie.
Tome y Janry siempre mostraron interés por adaptar sus historias a las inquietudes propias de su época; dejando a un lado la nostalgia por el propio personaje. Una muestra de este intento por separarse de la herencia recibida, lo vemos en la creación de un personaje totalmente nuevo: Vito Cortizone.
Existe un vínculo muy directo con el lector. Historias sencillas, tramas simples, dibujo muy detallista, con viñetas llenas de guiños que atrapan al lector.
Un recurso muy habitual es parodiar escenas de películas famosas de los años ochenta que encandilaron al público. Por ejemplo, en Aventura en Australia (1983), parodiaron En busca del Arca Perdida, la taquillera película de Indiana Jones de 1981.
Estilo autoparódico
Las viñetas están cargadas de detalles que te obligan a fijarte en sombras, cajones, cortinas, o ventanas.
Un asunto interesante que veremos con Tome y Janry es la propia dualidad sexual de Spirou y Fantasio. Así por ejemplo, Fantasio salta encima de Spirou cuando se enfrenta a Cianuro. Spirou tiene unos calzoncillos rojos en Aventura en Australia. O Fantasio le responde a John Helena «¿Qué te has creído? ¡De todas formas no eres mi tipo!».
Aunque zanjan definitivamente el tema primero en Vito el Cenizo (1991), cuando Fantasio aparece deprimido por mal de amores, al no ser supuestamente correspondido por una una tahitiana. Y de manera definitiva en Luna Fatal (1995), con la propia hija de Vito.
Yoann y Vehlmann
Yoann Chivard, al dibujo; y Fabien Vehlmann a los guiones, se pusieron al frente de Spirou en el año 2009. Aunque ya con anterioridad publicaron en la cabecera Una aventura de Spirou y Fantasio por… Una aventura que dejó muy buena impresión, y que de algún modo les sirvió para convertirse en los elegidos: Los gigantes petrificados.
En la serie regular, ambos autores van de menos a más. En los primeros álbumes arriesgan poco; y beben mucho de la herencia de autores anteriores, especialmente el omnipresente Franquin. Yoann y Vehlmann tratan en todo momento de conjugar herencia, respeto por la tradición y modernidad. Junto a Zorglub, Seccotine, el Conde o el Alcalde, aparecerán personajes nuevos como la joven y encantadora Ninon, o el malvado líder de VIPER. Da la impresión como si no quisieran arriesgar demasiado.
También merece que destaquemos el protagonismo que Yoann y Vehlmann van a dar a Spip, en la serie, con sus propias tramas paralelas al discurrir del álbum; como el romance entre Spip y una paloma, o la mansión que le ponen a Spip en las islas Mermelada.
Yoann, un dibujo muy moderno
Por otra parte, el dibujo de Yoann es dinámico y detallista. Un estilo muy moderno, que mantiene el cambio de estilo que ya iniciaron Tome y Janry una década atrás. Llama mucho la atención ver como Yoann se para en los pequeños detalles, creando en algunas viñetas, una narración enmarcada con numerosos detalles . Parejas que se hacen selfies, tiendas repletas de antigüedades, sombras que esconden pequeños detalles que captan la atención del lector. Sin duda, ya desde La amenaza de los zorketes, Yoann deja muy claro su gran dominio con los pinceles.
La frescura de Vehlmann
Fabien Vehlmann ha sucedido a toda una línea de autores de prestigio. Pero con tesón y trabajo se ha labrado su propia ruta, consiguiendo hacer un Spirou reconocible. Y eso es el mejor halago que se puede hacer para reconocer su trabajo. Guiones inteligentes, frescos, comprometidos con el mundo moderno y con mucha personalidad.
Otro aspecto muy llamativo que incorporan a sus álbumes son los finales abiertos en los que se introducen elementos del álbum siguiente. Y que sin duda invita al lector a esperar de manera impaciente el siguiente álbum.
También es destacable el protagonismo que se le da en la serie a los personajes femeninos; manteniendo así una dinámica que ya se empezó a manifestar con Tome y Janry. Prácticamente en todos los álbumes nos encontramos a mujeres empoderadas, que aunque con papeles secundarios, no dejan de tener cierta relevancia en el desarrollo de los capítulos. Como la abogada de la corporación VIPER, o las erasmus que están con Pacome.
La escuela Marcinelle y la revista Spirou
La escuela de Marcinelle
Cuando se habla de la escuela de Marcinelle, se hace referencia a un estilo de dibujo y una forma de narrar las historias; en contraposición con la escuela de Bruselas, caracterizada por su particular línea clara, y cuyo mayor exponente es Hergé, el creador de Tintín. Aunque como podremos constatar a lo largo de este artículo, la escuela de Marcinelle es mucho más que los estereotipos que se le atribuyen.
El tipo de dibujo que caracteriza habitualmente a la escuela de Marcinelle es caricaturesco, con personajes de nariz grande y bocadillos redondeados. Se cultivan los gags y las situaciones cotidianas como vehículo conductor. En teoría, todo lo contrario a lo que era la escuela de la línea clara. La escuela nació a mediados de los cuarenta en la localidad belga de Marcinelle. Allí nacieron el semanario Spirou, y la editorial Dupuis.
En ella publicaron una gran cantidad de artistas consagrados: Jijé (Jerry Spring); Morris (Lucky Luke); Franquin (Gastón Lagaffe); Tillieux (Gil Jourdan); Peyo (Los Pitufos); Roba (Bill y Bolita) o Will (Isabelle). Obviamente nunca existió una escuela a la que todos pertenecieran, pero sí que compartieron estilo e influencias. Y todos pasaron por Le journal de Spirou, la revista fundada por Dupuis.
Mucho más que un estilo
En realidad, no se puede entender qué es la escuela Marcinelle sin atender a la revista Spirou. Lo uno sin o otro, no son nada. La revista apostó por una historieta moderna, con bocadillos, y una narrativa muy versátil y humorística. Una dinámica que sirvió para revitalizar el negocio de las revistas infantiles y juveniles.
De este modo, en la escuela de Marcinelle encontramos un estilo dinámico, expresivo, y de gran riqueza técnica; que no siempre responde al estilo caricaturesco que habitualmente se le atribuye
La revista Spirou
Le Journal de Spirou nació en 1938 de la mano de Jean Dupuis. Una revista juvenil que se convirtió rápidamente en uno de los referentes europeos del cómic, junto a su gran competidora, la revista Tintín. La revista Spirou marcó el devenir del cómic humorístico en Europa. Y en ella encontraron cobijo autores que introdujeron una estética rompedora. De la mano de Jijé, la revista alcanzó grandes cotas; y la llegada de Franquin, sirvió para revitalizarla. El editor Charles Dupuis se había dado cuenta de la enorme capacidad de Franquin, y no dudó en ponerlo al frente de la serie de Spirou y Fantasio.
Charles Dupuis, Yvan Delporte, Maurice Rosy, o Jean Doisy. Todos ellos sellaron la edad de oro de la revista Spirou; y mantuvieron la revista a flote durante la ocupación nazi.
SPIROU Y FANTASIO, LA ETAPA DE TOME Y JANRY
Spirou y Fantasio. Integral 13 – 1981-1983
Este primer integral es el periodo de adaptación de Tome y Janry. En él se recogen las tres primeras historias largas del tándem que forman Tome y Janry: Virus, Aventura en Australia, y ¿Quién detendrá a Cianuro? Tres historias que vienen acompañadas junto a varios relatos cortos que entre 1981 y 1983 fueron publicando en la revista Spirou. Con estas historias, ambos se consagraron como dos artistas a tener en cuenta en el complejo mundo del cómic francobelga. Y se hicieron con la exclusividad de un personaje tan importante como Spirou. De este modo, gracias a estas historias, hoy día consideradas clásicas por los lectores, Tome y Janry se ganaron al público y a los jefazos de Dupuis.
La voz sin amo (1981)
Esta primera aventura de Tome y Janry es un relato de ocho páginas creado a modo de prueba para los mandamases de Dupuis. Un relato que finalmente fue publicado para sorpresa de sus creadores y en las que se abordan varios aspectos tradicionales de la serie: el antimilitarismo, el amor por los animales y Champignac.
El Conde de Champignac se va de viaje a un congreso científico y deja su castillo en manos de Spirou y Fantasio. Pero prácticamente está saliendo el Conde, y los problemas llaman a la puerta. Un colega científico les explica cómo un mono que estaba siendo sometido a experimentos por el ejército se ha escapado. Al mono se le estaba enseñando la habilidad del habla para ser usado como espía.
Los militares no quedan bien retratados en esta historia, demostrando un desprecio absoluto hacia el reino animal.
Ojo con la foto (1981)
Cuatro meses después, Tome y Janry reciben un nuevo encargo. Esta vez una historia de catorce páginas. El Conde de Champignac organiza en su casa una reunión con científicos provenientes de todo el mundo. Viejos colegas que hace quince años acordaron investigar para acabar con el hambre en el mundo.
Sin embargo, un chivatazo le ha informado que entre los científicos se ha colado un impostor mandado por una multinacional alimenticia con oscuros intereses. Spirou y Fantasio, disfrazados de asistente y mayordomo respectivamente, deberán investigar durante la velada para dar con el impostor.
El peligro (1982)
Relato de humor de cuatro páginas en donde Spirou y Fantasio se las tienen que apañar con el perro del vecino y una mofeta. Como curiosidad, en este pequeño relato aparece un retrato del marsupilami en las últimas viñetas.
Virus (1982)
Con Virus, Tome y Janry firmaron su primer contrato ante el señor Dupuis. Un mes después de la publicación de Ojo con la foto, Tome y Janry fueron llamados al despacho de Dupuis. Habían amenazado con apartarse del camino de Spirou. No querían entrar en una lucha en la que consideraban que llevaban las de perder. Sin embargo, contaban con un apoyo inesperado: Franquin apostaba por ellos, y Dupuis no iba a contradecir la decisión de Franquin. Con todo, firmaron su primer contrato y su primera obra larga, de cuarenta y cuatro páginas: Virus.
Virus supone un reencuentro con el universo de Franquin. Rescatan a un personaje clásico como John Helena; vuelve a aparecer el Conde de Champignac; y aparecen múltiples referencias a álbumes clásicos como Los hombres burbuja, La guarida de la Morena y El viajero del Mesozoico.
El álbum comienza con Fantasio acudiendo al puerto de El Havre a la caza de una noticia relacionada con una misión científica en la Antártida y un virus. Y allí se topará con un viejo enemigo, John Helena; que le contará su historia.
La primera gran historia de Tome y Janry
Helena le contará a Fantasio que tras salir de prisión no encontraba trabajo, por lo que cuando le surgió la oportunidad de trabajar en la estación polar «Isola Red», no lo dudó. Jamás se hubiera esperado lo que allí iba a encontrar. Allí se estudiaban la colección más espantosa de enfermedades del mundo. Y pese a las estrictas medidas de seguridad, un accidente provocó que todos los científicos se contagiaran con un peligroso virus. Los científicos fueron confinados, pero John Helena se escapó, infectando a todo aquel con el que entraba en contacto. Y escapando, es como llegó hasta Fantasio.
El virus se transmite con el contacto; se previene tapándose la boca; y las vacunas no son efectivas.. Y se hacen pruebas de sangre para detectarlo. Sin duda, un virus que guarda mucho parecido con el coronavirus que durante buena parte del 2020 arrasa el mundo.
Tras hablar con el Conde de Champignac, Spirou, Fantasio, Spip y John Helena se embarcan en una expedición hacia el polo sur para descubrir el antídoto al virus. Aunque lo que destaparán será un complejo caso de comercio de armas biológicas.
En la misión contarán con la inestimable ayuda de la guía Nadja Tovarich.
Si en historias anteriores ya trajo a colación los tentáculos de la industria alimenticia; ahora lo hace con los gobiernos y sus oscuros intereses en otros países.
El botones del presidente (1982)
Divertida historia de seis páginas en la que Spirou es confundido con un botones en la noche de Nochebuena, y acaba sirviendo al mismísimo presidente de los EEUU; que aunque no se especifica, es claramente Ronald Reagan, como demuestra la referencia cinematográfica.
De algún modo, esta pequeña historia sirve para explicar a los más jóvenes el origen del personaje de Spirou. Siempre buscaron la conciliación de lo viejo con lo nuevo desde el respeto al camino andado.
Aventura en Australia (1983)
Al mismo tiempo que se publicaba Aventura en Australia, Broca y Cauvin publicaban sus últimas aventuras de Spirou.
La aventura comienza parodiando el inicio de Indiana Jones en busca del Arca Perdida. Y supone el reencuentro con otro personaje muy querido del universo Franquin, Seccotine.
Y por supuesto los guiños no quedan ahí. Spirou y Fantasio volarán rumbo a Australia en el vuelo 714 a Sidney. ¿Os suena algún cómic francobelga con este título?
El motivo del viaje no es otro que atender al requerimiento del Conde de Champignac, una vez más. Sin embargo, esta vez les hace ir a Australia para un asunto relacionado con la minería; supuestamente con yacimientos de ópalo. Aunque realmente, el conde ha ido hasta Australia a investigar un yacimiento arqueológico sobre una cultura desconocida que tallaba gigantescas piedras con forma de cara.
Un relato lleno de secuestros, desapariciones y acción, que denuncia el tráfico ilegal de minerales, el expolio arqueológico, y el maltrato a los aborígenes.
La única y singular historia más o menos cierta de la infancia de Spirou, contada por el tío Paul (1983)
Curiosa historia en la que Tome y Janry hacen un homenaje a los 45 años de Spirou y Fantasio. Para ello hace un repaso por los orígenes del personaje; desde su infancia a su edad adulta. Aparecen Seccotine, Peloduro, Spip, así como algunos de los creadores de la serie, e incluso el señor Dupuis. Una historia sencilla que cautiva al lector habitual, y que muestra por primera vez al pequeño Spirou.
Ya hemos señalado anteriormente que Tome y Janry plantearon su Spirou desde el máximo respeto a lo se había escrito con anterioridad; sin embargo, eso no les privó de utilizar la parodia sobre aventuras clásicas.
Pérfido falsificador (1983)
Otro relato corto, en el que volvemos a ver las constantes alusiones al propio universo de Spirou. Utilizan para ello a un malvado falsificador que intenta vender el famoso número 5 de Gaston Elgaffe. Una denuncia en clave de humor del afán consumista que impregna el mundo del cómic.
¿Quién detendrá a Cianuro? (1983)
Esta fue la última historia en la que Tome y Janry trabajaron a cuatro manos. Hasta ahora, aunque el dibujante oficial era Janry, Tome dividía las viñetas y esbozaba a los personajes, para que Janry los perfilase. Pero ¿Quién detendrá a Cianuro? supondrá la especialización de cada uno de manera definitiva.
La historia supone por otra parte un acercamiento a los estragos de la automatización del trabajo y la deshumanización de la sociedad. De este modo, Tome y Janry siguen utilizando a Spirou y Fantasio para conectar la serie con la realidad de los lectores; tal como habían hecho sus predecesores.
La creación de una nueva fábrica de robots pone en pie de guerra al pueblo de Champignac, que se siente estafado con las falsas promesas de mano de obra local.
Y por otro lado, Spirou y Fantasio conocen a Catenario, antiguo operario de la estación de trenes de Champignac, e inventor de Telesforo (una cámara de fotos androide); y Cianuro, un ciborg femenino que tiene la capacidad de manipular cualquier aparato con instalación eléctrica. Cianuro se ha revelado contra su creador, y está sembrando el pánico en la ciudad de Champignac. Spiroy y Fantasio, por supuesto, ayudarán para atraparla.
Una historia trepidante, que no da un respiro al lector, y con un giro final muy interesante.
- Spirou y Fantasio. Integral 13 (Spirou et Fantasio. L´intégrale 13. 1981-1983)
- Janry (dibujo, tinta); Philippe Tome (guion)
- Traducción: Diego Álvarez
- Diseño y rotulación: Fernando Fuentes
- Editores: Ricardo Esteban Plaza y Marion Duc
- Dibbuks
- 2015
Spirou y Fantasio. Integral 14 – 1984-1987
Consagrados Tome y Janry, en este volumen dan rienda suelta a su imaginación, dotando al universo de Spirou de nuevos personajes; y rescatando otros que estaban en el olvido. Pero sobre todo, el gran logro que podemos percibir en las historias que vemos a continuación, es la actualización a la que es sometida la serie, sin perder un ápice de su encanto. Algunos de los álbumes que están en este integral forman parte de lo mejor de los autores.
La hucha ya está aquí (1984)
Historia corta, de dos páginas, en la que se hace una crítica velada a la ludopatía y a los concursos televisivos. Un capítulo muy interesante por dos aspectos. Primero, por su capacidad de transmitir tanto en tan poco espacio a través del humor. Y lo segundo por adelantarse a su tiempo y saber ver el efecto que poco después tendrían los concursos radiofónicos y televisivos en la sociedad.
¡El increíble eructo! (1984)
Relato de doce páginas en donde un experimento del Conde de Champignac se complica y convierte al bonachón de Celestino Dupilon en una especie de Hulk o el Thriller de Michael Jackson. Celestino Dupilon, veterinario jubilado del pueblo de Champignac; un personaje creado por Franquin en El viajero del Mesozoico (1960), y que con el paso de los años fue cogiendo carisma y personalidad propia.
Precisamente la evolución del personaje que se percibe en esta historia es una de las claves con las que Tome y Janry tuvieron que lidiar a lo largo de toda su etapa al frente de Spirou: hacer evolucionar a unos personajes que se mantienen desde hace décadas en un universo que se percibe como inmutable.
El pasajero del tiempo (1985)
El paso de un cometa cercano a la órbita terrestre, coincide con la marcha del Conde de Champignac, que tiene compromisos familiares; y la llegada de alguien que parece el mismísimo conde, pero que en realidad es un descendiente suyo: Aurelio de Champignac, su sobrino. Aurelio procede de pleno siglo XXI, y viaja al pasado en busca de semillas que demuestre ante la comunidad científica el logro de su investigación.
Un relato que nos plantea un futuro desolador, en donde la sobreexplotación forestal ha provocado la desaparición de muchas especies vegetales. Juega además con los viajes temporales que por entonces estaban en boga, como demuestra Regreso al Futuro de 1985. (Aunque lo cierto es que no hay influencia de ninguna de ambas obras sobre la otra, ya que ambas se estrenan prácticamente al mismo tiempo). Y nos plantea un viaje al pasado, al territorio colonial portugués: Palombia en pleno siglo XVI. Siendo este arco el mejor sin duda de El pasajero del tiempo; con Fantasio y Spirou siendo confundidos por espías de Francisco I, rey de Francia.
Sublime la parte en la que el verdugo tortura sin éxito a Fantasio, con prácticas que recuerdan mucho a las torturas policiales de los calabozos, y no tanto a la tortura medieval.
En este álbum conocemos también a un ser que aparece en parte como oposición al marsupilami, el esnulfateador; el resultado de un cruce ente un fox de pelo corto y varios cerdos de gran capacidad olfativa. Un ser repugnante con la capacidad de absorber todo a su paso, produciendo burbujas por su trasero. Un ser destinado a aparecer en una sola historia, pero con el carisma suficiente como para ser recordado. De alguna manera Tome y Janry estaban innovando, pero sin arriesgar del todo.
El despertar de Z (1986)
Continuación directa de la aventura anterior. Primero un viaje al pasado; y ahora un viaje al futuro. El resultado es un díptico magnífico. Una rara avis en Spirou, cuyas historias siempre se pueden leer de forma independientes.
Fantasio y Spirou apenas recuerdan lo sucedido en El pasajero del tiempo como un sueño difuso, compartido entre ambos. Y prácticamente sin darse cuenta, se ven metidos de lleno en un universo al estilo Blader Runner. De nuevo, las referencias cinematográficas del álbum son inevitables.
Aurelio de Champignac está en manos del tirano más despiadado que ha pisado la faz de la tierra; y le ha obligado a crear el arma más terrible de toda la historia de la humanidad: aquella que es capaz de controlar el tiempo. Se trata de Zorglub, aunque no es el Zorglub que nuestros héroes ya conocen; sino un descendiente suyo que ha prohibido el uso de los aparatos de medir el tiempo, y ahora nadie sabe cuánto es un segundo, un año, o una hora. No aparecía Zorglub en una aventura de Spirou desde Tora Torapa, de Fournier, en 1973.
Una de las mejores aventuras de Tome y Janry
Este futuro controlado por Zorglub es despiadado. Cualquier iniciativa propia es reprimida. Todos los ciudadanos tienen controlados sus actos cotidianos a través de un avisador temporal que te dice cuándo debes realizar cada acto del día. Y los disidentes se encuentran de frente con la represión.
Magistral el juego de palabras entre Gulaj, reloj y Zorglub para hacer referencia al Zorloj, el último reloj que sigue funcionando para controlar la cotidianeidad de los ciudadanos, y en donde los disidentes son condenados a trabajos forzados. También hay referencias al castigo de la reeducación, algo muy común en la China comunista.
Sin duda, una de las mejores historias de la etapa de Tome y Janry. Como curiosidad, en esta historia Tome y Janry añadieron un tercer compañero de trabajo: en adelante Stéphane de Becker se encargaría del color.
Spirou y Fantasio en New York (1987)
En esta ocasión Tome y Janry nos llevan hasta una ciudad real, algo poco común en las aventuras de Spirou. Y lo hacen presentándonos un retrato muy cercano, del día a día de la ciudad de Nueva York: sus barrios, sus habitantes, su idiosincrasia, sus edificios. La tierra de las oportunidades, con la bolsa de Nueva York de fondo; capaz de arruinar o enriquecer a los empresarios y emprendedores.
El lugar ideal para que florezcan las mafias, especialmente chinos e italianos, que en esta aventura tendrán un papel fundamental.
Spirou y Fantasio viajan a New York gracias a un par de billetes proporcionados por la revista Turbina, que le ha hecho un encargo a Fantasio. Pero también por el supuesto premio que les ha tocado en una pizza. Pero en el fondo, nada es lo que parece. Han sido invitados por la Lucky,s Bank, de Don Vito Cortizone, un capo de la mafia italiana, que se convertirá por méritos propios en el nuevo villano de la serie. Y sin herencias previas. Una creación genuina de Tome y Janry.
Como dato curioso, a la mafia italiana siempre le acompaña una nube con forma de calavera, y que desprende lluvia constantemente. Otro dato curioso, la cabina de teléfono del barrio italiano tiene la forma inclinada de la torre de Pisa. O el ala del avión con la cara del Esnulfateador.
Buena parte de la culpa de que la aventura se situase en Nueva York la tiene el que por entonces era director de la editorial Dupuis, Jean Van Hamme.
- Spirou y Fantasio. Integral 14 (Spirou et Fantasio. L´intégrale 14. 1984-1987)
- Janry (dibujo, tinta); Philippe Tome (guion)
- Traducción: Diego Álvarez
- Diseño y rotulación: Fernando Fuentes
- Editores: Ricardo Esteban Plaza y Marion Duc
- Dibbuks
- 2016
Spirou y Fantasio. Integral 15 – 1988-1991
Magnífico volumen con numerosos y excelentes extras, y que incluye algunos de los álbumes de culto de la serie. Tome y Janry ya se han adueñado completamente de Spirou y Fantasio, y le han dado una impronta totalmente nueva; quitándose todo ropaje con olor a clásico. Parece una serie totalmente actual y fresca, sin herencias, pero sin olvidar el pasado. Una delicia de lectura capaz de enamorar a las nuevas generaciones, y contentar a los lectores fieles que arrastraba la serie.
Con el agua al cuello (1988)
Con un dibujo espectacular, y un trazo muy moderno, Spirou celebra en Con el agua al cuello, nada más y nada menos que su jubileo. Cincuenta años llenos de aventuras y desventuras junto a su compañero Fantasio. Esta historia nos sumerge en el corazón de Khadajas Tron, cerca de Nepal, en las estepas asiáticas.
Spirou y Fantasio se meten en medio de una guerra civil que ha convertido la región en un auténtico polvorín. Acuden hasta allí acompañando a un grupo de variopintos personajes, aquejados de un extraño hipo permanente; y la idea es intentar que pasen una aventura llena de intensidad y peligros, para conseguir que se le quite el hipo, tal como les recomienda el doctor Placebo. Pero la aventura se les escapa de las manos, al meterse de lleno en un país en guerra, que nos recuerda mucho al conflicto de Afganistán con Rusia que se inició a finales de los años 70. Se trata de una historia muy realista, que sitúa a Spirou y Fantasio en un país inédito hasta el momento. Fantasio y Spirou caerán por un barranco y serán dados por muertos.
Una aventura que sin embargo queda abierta, y que continua en el siguiente álbum. Un díptico que se puede disfrutar perfectamente por separado; pero que gana intensidad si se leen seguidos.
El valle de los proscritos (1989)
En el anterior álbum, Fantasio y Spirou fueron dados por muertos, pero con mucha suerte, ambos sobreviven. En esta aventura recorrerán el valle de los proscritos; el lugar que han estado buscando en el álbum anterior; y al que llegaron tras la pista de los exploradores Gunter y Maginot. Allí se toparán con todo tipo de animales, que parecen sacados de la imaginación más infantil: el cascópodo, el tocóncoto, hamacarnívora; y sobre todo, el mosquito malalechis volantis, cuya picadura infesta a su víctima con la hostialisis malalechis; tal como le pasará a Fantasio.
Un álbum de aventuras y acción que transcurre en un lugar del que nuestros aventureros no pueden salir; con escenas realmente claustrofóbicas y emotivas, y en el que tendrá lugar el enfrentamiento entre Spirou y Fantasio. Ambos amigos se ven arrastrados por las circunstancias a una espiral de violencia, aunque finalmente se verán obligados a colaborar para salir del valle de los proscritos. Llama la atención que el detonante de la violencia de Fantasio sea la envidia acumulada durante años a la sombra de su compañero Spirou. Y que su grito de guerra sea «Revista Fantasio». El clímax final del álbum tiene lugar justo en el momento en el que Spirou corre peligro de muerte, y Fantasio deja a un lado sus más depravados instintos para salvar a su amigo. Al final, la amistad se impone la agresiva locura de Fantasio.
Como curiosidad, en esta historia se hace mención al marsupilami, al encontrar un extraño animal que emite el sonido «houba», y que confunde a nuestros protagonistas. Un guiño a esa legión de seguidores que pedían la vuelta del marsupilami.
Spirou y Fantasio en Moscú (1990)
Posiblemente estemos ante uno de los cinco mejores álbumes de la etapa de Tome y Janry. Nuestros jóvenes aventureros se disponen a irse de vacaciones al hemisferio sur, a la playa, cuando de repente son obligados a embarcarse rumbo a Rusia con una misión: infiltrarse como falsos miembros de la KGB y ayudarle a derrotar a la mafia rusa.
Con esta sencilla premisa, Tome y Janry nos sumergen en el corazón de Moscú: el ballet de Bolshói, la piscina Moskva, la Plaza Roja o el Palacio de Invierno.
Así como numerosas referencias a la cultura rusa y soviética: las muñecas rusas, el frío ruso, la mafia rusa, y por supuesto, la momia de Lenin. De hecho, el argumento de esta nueva aventura gira en torno al intento de robo de la momia de Lenin, por parte de la mafia rusa.
Y por si todo esto no fuera suficiente, en esta aventura volverá a aparecer Zantafio, el primo malvado de Fantasio, infiltrado como el príncipe Tanaziof, supuesto heredero legítimo de la familia imperial expulsada tras la revolución comunista, y que ahora pretende derrocar al actual régimen. Si aparece Zantafio, la acción está asegurada.
Vito el cenizo (1991)
Pocos meses después de que Spirou y Fantasio lucharan contra la mafia rusa, volverán a encontrarse con un viejo conocido, Don Vito Cortizone, el antiguo jefe de la mafia neoyorkina que fue reducido por Spirou y Fantasio. Ahora le persigue la mala suerte y el llaman Vito el Cenizo. Pero el destino hace que sus vidas vuelvan a cruzarse, en este caso en medio de un atolón perdido en medio del Océano Pacífico. Don Vito ha llegado hasta allí por culpa de un naufragio, y nuestros héroes le salvan sin saber en un principio quién es.
Una aventura excelente que sirve para servir ahondando en la compleja relación de amistad que une a Spirou con Fantasio.
Hay algunos guiños que llaman la atención, como el traje de botones con el que Don Vito recibe a sus invitados al llegar a la isla y que nos recuerda al traje rojo de Spirou.
Muy interesante cómo se aborda la depresión de Fantasio, por culpa de un mal de amores. A lo largo de buena parte del capítulo sus bocadillos aparecen negros, y siempre tiene una actitud derrotista. Todo un guiño de Tome a Janry, que pasaba por dificultades personales. De algún modo, Tome le hablaba a través de Fantasio a Janry.
Al final, Don Vito volverá a salir derrotado, pero sin duda, no será su última aparición.
- Spirou y Fantasio. Integral 15 (Spirou et Fantasio. L´intégrale 15. 1988-1991)
- Janry (dibujo, tinta); Philippe Tome (guion)
- Traducción: Diego Álvarez
- Diseño y rotulación: Fernando Fuentes
- Editores: Ricardo Esteban Plaza y Marion Duc
- Dibbuks
- 2016
Spirou y Fantasio. Integral 16 – 1992-1999
Después de más de una década al frente de la serie, Tome y Janry abandonan Spirou y Fantasio, y lo hacen por la puerta grande. Con tres álbumes magníficos, que tocan temas realmente inéditos en la serie después de más de cincuenta años publicándose; y que rompen una delicada línea en el estilo de la serie cuyas consecuencias serán fundamentales para el futuro de la serie. Franquin marcó una época, pero estos dos autores, que llegaron casi sin querer, grabaron su nombre junto al de Franquin. Tome y Janry se cansaron y abandonaron la serie. Varios son los motivos. El primero el propio cansancio provocado por el constante intento de renovar constantemente la serie; el segundo el éxito de El Pequeño Spirou. Pero en cualquier caso, su legado permanecerá para siempre entre nosotros.
El rayo negro (1992)
Curiosa temática la de este álbum, en la que una vez más un invento del Conde de Champignac termina de manera accidentada. En este caso, el invento con setas provoca que la piel de los sujetos se transforme. Así, Spirou, Fantasio, y algún que otro champigniano acabará con el color de la piel negro. La historia podría haberse convertido en una crítica feroz al racismo y la xenofobia, aunque el hecho de que sea una serie destinada a un público eminentemente juvenil, acaba descafeinando la carga crítica.
El álbum aborda el racismo y la xenofobia en Francia. Aunque la idea original era trasladar a Spirou y Fantasio a Sudáfrica, finalmente se quedan en Champignac. De este modo, se enfoca el racismo desde la perspectiva de una localidad rural centroeuropea. Una foto fijada en el tiempo. Con esto se aborda uno de los temas tabú, junto a la religión, el sexo y la política. Basta con cambiarle el color de la piel a un individuo, para que nadie le reconozca.
La decisión de publicar el álbum fue ciertamente polémica; tal como pasará con el siguiente.
Luna Fatal (1995)
Después de 60 años, Spirou se cruzaría en una de sus aventuras con chicas realmente relevantes; uno de los temas que durante años había estado vetado. Y ahora no son Seccotine o Cianuro, que hasta el momento habían sido de las pocas mujeres que habían aparecido en la serie. Ahora serán varias las que aparezcan, con curvas suntuosas y un aspecto sexi, lo que marca una ruptura total con el tipo de personajes femeninos usados hasta la fecha. Tome y Janry pusieron patas arriba una ley no escrita que les impedía abordar desde una perspectiva adulta a los personajes femeninos. Una buena dosis de humanidad; y todo un reto para los autores.
El argumento del álbum gira nuevamente en torno a Vito Cortizone y su hija Luna. La mafia italiana y la mafia china se enfrentan en Nueva York. Pero los chinos han encontrado un arma prácticamente infalible: Suspiro de Jade. Una mujer fatal capaz de enamorar a los miembros de la mafia italiana y neutralizarlos; gracias a un filtro de amor que la convierte irresistible. Esta situación lleva a Vito a secuestrar a Spirou y obligarle a trabajar codo con codo con él. Sabe que Spirou es el único con posibilidades de no sucumbir a los encantos de Suspiro de Jade.
Un álbum que aborda a los personajes de forma totalmente diferente; con un tono claramente transgresor con los cánones de la serie, después de más de 40 años. La asexualidad del personaje, exposición de fotos eróticas, insinuaciones, erotismo o seducción. Todo tiene cabida en este álbum que contó con la participación anecdótica de Dan Verlinden en el color; un fijo de El pequeño Spirou.
Máquina que sueña (1998)
Tres años después de Luna Fatal, Tome y Janry firmaron su último álbum al frente de Spirou; no sin polémica. Después de diecisiete años, ambos autores consideraron que había llegado el momento del cambio. Spirou debía evolucionar y adaptarse a los cambiantes años noventa. El anime y el manga habían echado raíces en Europa, modificando estética y temáticamente el mundo del cómic. Y el gran adalid del cómic franco-belga no podía quedarse al margen de ese movimiento. Tome y Janry entendieron que se debía producir una obligada renovación del personaje. Y así llegó Máquina que sueña en el año 1998.
Inspirado en películas como Total Recall (Desafío Total), de 1990; o Blade Runner, de 1982; Tome y Janry plantearon una aventura nunca vista en el universo de Spirou. El joven botones se verá desprendido de su habitual indumentaria y se meterá de lleno en una trama en la que se convierte en enemigo público número uno. Rechazado por sus amigos, perseguido por la policía, solo contra todos. ¿Por qué le persiguen? ¿Por qué le ha mentido Seccotine? ¿De qué tiene miedo?
Una aventura de búsqueda de identidad, en un momento clave de la serie en la que los autores exigían cambios gráficos; así como en la personalidad y el trato de los personajes. Percibimos un cambio radical en la manera de tratar a Spirou, o incluso a Seccotine, que reivindica ser llamada por su nombre de pila, Sofía.
El fin de una época dorada
Sin embargo, después de mas de una década dorada en cuanto a ventas se refiere, los dos últimos álbumes habían descendido notablemente el número de ventas. Y pese a todo, estaban contentos porque habían conseguido que el cambio se asimilase mejor de lo esperado.
Con el tiempo, se responsabilizaría a este álbum y a Tome de iniciar la cabecera «Una aventura de Spirou por…». Aunque él nunca quiso reconocer tal responsabilidad.
Zorglub en Cuba (2011)
Después de Máquina que sueña, Tome y Janry fueron abandonando Spirou en detrimento de El pequeño Spirou. Y cuando se pusieron manos a la obra con la que debía ser su siguiente historia, Zorglub en Cuba, se encontraron con el rechazo de la nueva dirección de la revista. Para el nuevo editor Philippe Vandooren, Spirou no era una prioridad; y Tome y Janry abandonaron definitivamente el nuevo álbum y la serie.
Por suerte, en el año 2011 se publicó lo poco que Tome y Janry habían creado de la que se acabaría convirtiendo su última aportación a la serie; y en donde habían vuelto a rescatar la estética clásica de los personajes.
- Spirou y Fantasio. Integral 13 (Spirou et Fantasio. L´intégrale 13. 1992-1999)
- Janry (dibujo, tinta); Philippe Tome (guion); Cerise (color)
- Traducción: Lorenzo F. Díaz
- Diseño y rotulación: Fernando Fuentes
- Editores: Ricardo Esteban Plaza y Marion Duc
- Dibbuks
- 2017
SPIROU Y FANTASIO, LA ETAPA DE YOANN Y VEHLMANN
La amenaza de los zorketes (2010)
Champignac amanece invadida por unos extraños seres aparentemente sin cerebro. Los zorketes. Unos seres que parecen nacidos de la mente de Zorglub. Y la naturaleza ha mutado a un ritmo vertiginoso, siguiendo las leyes de Darwin. La vida en Champignac no para de cambiar. Animales y plantas se reproducen, mueren y se adaptan en cuestión de horas; evolucionando a formas insospechadas.
Por otro lado, se desconocen los motivos, pero el ejército está evacuando a la población. Aunque como era de esperar, Fantasio y Spirou quieren llegar hasta el fondo del asunto y averiguar qué es lo que está ocurriendo. ¿Estará Zorglub detrás de todo? ¿Qué esconde el ejército? ¿Tiene que ver con un nuevo experimento fallido del Conde?
Se trata del primer álbum publicado por Yoann Chivard y Fabien Vetlmann; dos figuras de reconocido prestigio en Francia. Con este álbum asistimos a un nuevo comienzo de la serie, en donde se reivindica la evolución de lo antiguo hacia algo totalmente nuevo y distinto; precisamente el eje fundamental de la aventura.
Un nuevo homenaje a la etapa de Franquin
Se trata pues, de un álbum que pretende recuperar el pasado para relanzar la serie. Pareciera como su cada vez que un nuevo equipo de autores se hace cargo de Spirou, lo primero que tuvieran que hacer es homenajear el pasado del personaje; especialmente la etapa de Franquin. Pero en esta ocasión supone un intento fallido a nuestro parecer, que no terminará de convencer a los más fieles seguidores de las aventuras de Spirou. Aunque a su favor tiene el gran trabajo de Yoann a los pinceles. Especialmente en este número en donde creará numerosas especies desconocidas.
Las referencias a aventuras anteriores son muy evidentes: Zorglub, el dinosaurio del Mesozoico, o las pociones X1 y X2, entre otras. Pero también hay otras referencias a elementos más modernos, propios de la cultura popular, como las referencias a la película El planeta de los simios; el parecido de los zorketes con los zombis; o las chicas Erasmus que acompañan a Pacome.
- Spirou y Fantasio. 51. La amenaza de los zorketes (Spirou et Fantasio. 51. Alerte aux Zorkons)
- Fabien Vehlmann (guion); Yoann (dibujo); Fred Blanchard (diseño); Hubert (color)
- Traducción: Diego Álvarez
- Diseño y rotulación: Fernando Fuentes
- Dibbuks
- 2015
La cara oculta de Z (2011)
Con este álbum, el número 52, ya tiene Spirou su aventura en la Luna. Continuando el álbum anterior, Spirou y Fantasio despiertan en la Luna; y como no podía ser de otro modo, Zorglub está detrás de todo. Ha creado una base lunar con un laboratorio para investigaciones, y un macro complejo de casinos y ocio para billonarios. Un proyecto que solo se puede llevar a cabo gracias a la inversión de la empresa privada; que financió el proyecto a cambio de dirigirlo y controlarlo. Un alto precio que Zorglub no está dispuesto a pagar tan alegremente.
Deportistas famosos, actores y excéntricos millonarios se pasean por el complejo ante la mirada atónita de Spirou y Fantasio. Zorglub ha creado un parque de ocio para millonarios, a cambio de un pequeño centro de investigación lunar. Experimentos de gran importancia que podrán permitir conquistar el sistema solar. ¿Qué tramará Zorglub?
Sin embargo, un terrible incidente pondrá a pruebas la viabilidad del proyecto. Por accidente Spirou y Spip se ven expuestos a una lluvia solar, que les provocará terribles efectos. Y al mismo tiempo, Zorglub manifiesta sus verdaderas intenciones de conquistar la luna.
Una aventura disparatada, que sigue sin estar a la altura de una serie como Spirou. Muchos chistes fáciles y referencias contemporáneas para buscar empatizar con el lector; como el matrimonio homosexual de las erasmus Lena y Astrid; o la transformación de Spirou en hombre lobo.
- Spirou y Fantasio. 52. La cara oculta de Z (Spirou et Fantasio. 52. La face cachée du Z)
- Fabien Vehlmann (guion); Yoann (dibujo); Fred Blanchard (diseño); Hubert (color)
- Traducción: Diego Álvarez
- Diseño y rotulación: Fernando Fuentes
- Dibbuks
- 2016
La trampa viperina (2012)
Cuando se publicó el álbum 53, sin duda, todos coincidieron en señalar que fue el mejor del tándem Yoann y Vehlmann hasta la fecha.
La trama comienza con la revista Spirou siendo llevada a los tribunales por denigrar de forma sistemática los valores morales de nuestra sociedad. La revista es denunciada por incitar en los más jóvenes a imitar las supuestas hazañas de Spirou y Fantasio. Un juicio que no hubiera tenido recorrido de no contar entre la parte acusadora con una abogada implacable. Sin embargo, el proceso judicial pronto se descubrirá como parte de un engranaje mayor que busca hacerse con el control de la revista Spirou.
La revista, arrinconada por sus obligaciones de pago de la condena, se ve obligada a aceptar una oferta de absorción por parte de la empresa VIPER CORPORATION. Y a partir de aquí los hechos se suceden. Spirou y Fantasio empiezan a manejar más dinero del que pueden gastar. Y después Spirou es invitado a conocer al presidente de la corporación Viper, cuya sede se encuentra en las islas Mermelada. Allí Spirou será recluido en un estado de semi-esclavitud, viviendo a todo lujo pero sin libertad.
Un álbum que aborda cuestiones morales
La narrativa de la historia te atrapa desde el principio. No es solo la propia trama, que ya de por sí es apasionante. Sino también por las otras historias que se narran de manera paralela a lo largo del álbum. Los nativos de la isla que se ven obligados a malvivir en el cráter de un volcán o en la grieta de una montaña. La policía al servicio del poder. Los bancos carroñeros que llamados por el dinero rápido tratan de vender sus activos tóxicos. O el uso de la prensa para manipular la opinión.
Sin duda, un álbum en el que se pone en cuestión asuntos de amplio calado como son la falta de trasparencia del sistema judicial, la doble moral de la sociedad, o la propia libertad de prensa. Además, por supuesto, de un aspecto tan relevante como es el hecho de que con dinero y poder se puede difamar y sembrar la duda sobre cualquier persona; sembrando el estupor y la desconfianza en una pequeña población que antes te valoraba de otro modo. Como le pasará a Spirou con los habitantes de Champignac. Una historia que nos recuerda mucho a la inquietante trama de Máquina que sueña, de Tome y Janry.
- Spirou y Fantasio. 53. La trampa viperina (Spirou et Fantasio. 53. Dans les griffes de la vipére)
- Fabien Vehlmann (guion); Yoann (dibujo); Fred Blanchard (diseño); Hubert (color)
- Traducción: Lorenzo F. Díaz
- Diseño y rotulación: Fernando Fuentes
- Dibbuks
- 2015
Un botones en Sniper Alley (2014)
Siguiendo las buenas sensaciones de la aventura anterior, Un botones en Sniper Alley es una historia muy divertida. Spirou y Fantasio reciben la visita inesperada de Don Vito Cortizone, que les cuenta la historia de su tío-abuelo Don Contralto, «injustamente sentenciado» a 634 años de cárcel por un robo. Pero desde su presidio Don Contralto se centró en la arqueología y desde su celda ha encontrado muchos tesoros solo por deducción. Y ahora está a punto de encontrar el emplazamiento del tesoro de Alejandría, el legado de la famosa Biblioteca de Alejandría.
Don Contralto piensa que está escondido en el corazón de Aswana, un país que ha sido recientemente ocupado por fuerzas occidentales, lo que permite consultar sus documentos y archivos, hasta ahora prohibidos. Un asunto real que por desgracia ha pasado y sigue pasando en nuestros días. Finalmente, Spirou y Fantasio aceptarán bajo coacción ir a Aswana en búsqueda del tesoro.
Un álbum de Spirou y Fantasio lleno de curiosidades
Como detalle curioso, para entrar en el país utilizará su viejo traje de botones, del que parece nunca poder separarse. El motivo es que entrarán en el país en calidad de personaje público, con la excusa de que vienen a animar la moral de las tropas franco-belgas.
Lo primero que descubrirán será que la guerra parece lejos de haber terminado. Los rebeldes siguen usando las armas, y muy pronto Spirou se verá en medio de un campo de francotiradores en el barrio de Sniper Alley.
Sin embargo, cuando Spirou y Fantasio se adentren en el pueblo, descubrirán esa otra realidad; y se toparán con la hipocresía occidental, que analiza los países desde su propia perspectiva, sin tener en cuenta la idiosincrasia local.
Spirou y Fantasio, y la crítica social
En este álbum aparecen viejas caras conocidas como el especialista en arqueología Martin, Poppy Bronco, o el propio Don Vito.
Un aspecto muy interesante presente en buena parte del álbum, es la denuncia explícita al expolio arqueológico. El álbum nos recuerda mucho a Indiana Jones y la última cruzada. Una especie de escape room con pasillos laberínticos, hachas que caen del techo, hongos alucinógenos, engranajes subterráneos e ilusiones ópticas.
Y luego por otra parte hay curiosidades tales como el bote de fabadas asturianos que utilizan como arma arrojadiza; la aparición de Gastón en un recuerdo de los personajes; y la referencia al Marsupilami.
Ficha técnica
- Spirou y Fantasio. 54. Un botones en Sniper Alley (Spirou et Fantasio. 54. Le groom de Sniper Alley)
- Fabien Vehlmann (guion); Yoann (dibujo); Fred Blanchard (diseño); Hubert (color)
- Traducción: Lorezno F. Díaz
- Diseño y rotulación: Fernando Fuentes
- Dibbuks
- 2018
La furia del marsupilami (2018)
Un álbum histórico, en el que Yoann y Vehlmann nos cuentan el regreso del marsupilami cuarenta años después: La editorial Dupuis ha recuperado los derechos del adorable personaje de Franquin al comprar parte de MARSU productions. Y ambos autores lo celebran con un álbum con el que se asientan ya con solidez al frente de Spirou y Fantasio.
En su quinto álbum, Yoann y Vehlmann tiran de nostalgia y emotividad. No solo rescatando al clásico personaje de Franquin, sino con constantes homenajes a lo largo de sus páginas, con la vuelta también de Zantafio, la zorglonda, Champignac o el regreso a la selva de Palombia. Parecía complicado, pero sin duda vuelven a mejorar sus registros.
La furia del marsupilami conecta directamente con el final de El botones de Snipper Alley, y la aparición por sorpresa de unas fotos del marsupilami en una jaula, con Fantasio y Spirou en una actitud poco cariñosa hacia él.
El recurso de la nostalgia
Spirou y Fantasio acuden a un carnaval en Champignac, con Spirou disfrazado de Naruto. Y allí caen en la cuenta de que sus recuerdos han sido borrados con Zorglonda; y que detrás de todo está Zantafio. ¿Tendrá todo ello que ver con la misteriosa fotografía del Marsupilami? Para descubrirlo viajarán hasta Palombia y allí se reencontrarán con el marsupilami. Aunque el primer reencuentro no será el esperado.
Algunas escenas del álbum son realmente llamativas, como la escena en la que Zantafio se está pinchando; aunque luego aclara que es un reconstituyente. Las referencias a los retrasos de Vehlman y Yoann. O las escenas en las que reaparece el marsupilami y que tanto recuerdan al clásico de Franquin, El nido de los marsupilamis.
El álbum se completa con 8 páginas extras sobre el marsupilami de Franquin.
- Spirou y Fantasio. 55. La furia del marsupilami (Spirou et Fantasio. 55. La colère du marsupilami)
- Fabien Vehlmann (guion); Yoann (dibujo); Fred Blanchard (diseño); Hubert (color)
- Traducción: Lorezno F. Díaz
- Diseño y rotulación: Fernando Fuentes
- Dibbuks
- 2018
Una aventura de Spirou y Fantasio por…
De manera paralela a la serie regular, desde el año 2006 se viene publicando historias enfocadas en Spirou y Fantasio, pero con un enfoque distinto al de la continuidad de la serie regular. Propuestas frescas y ambiciosas que han dado muchas buenas lecturas al aficionado; gracias en parte a la libertad que tienen sus autores, que no se ven sujetos al encorsamiento de un universo tan inmenso como el de Spirou. Yann y Olivier Schwartz; Frank Pé y Zidrou; o Yoann y Vehlmann, han pasado por esta serie.
Spirou y los soviets (2020)
Fabrice Tarrin (dibujo) y Fred Neidhardt (guión) nos dejan una aventura de Spirou y Fantasio que nos recuerda mucho al clásico Tintín en el país de los Soviets. Un cómic con un dibujo exquisito, y una historia entretenida que lleva a Spirou y Fantasio hasta la Rusia Comunista para salvar al conde de Champignac.
El conde ha sido secuestrado y le están presionando para que colabore en un proyecto denominado GPS, y que cuando irradia a un sujeto, le anula su voluntad. Los rusos han conseguido aislar al gen comunista, y con la ayuda de un champiñón especial, el Astalin marxoide, pretenden irradiar el comunismo por el mundo. Spirou y Fantasio van a su rescate, y convencen a los directivos de Dupuis para que les paguen el viaje a Rusia, hacer un reportaje, y de paso rescatar en secreto al Conde.
Un homenaje a Tintín en el país de los soviets
El mayor problema del álbum es la enorme cantidad de gags absurdos y estereotipados acerca del comunismo y de Rusia. El consumo excesivo de vodka, los gulags, Rusia visto como un país cerrado y con censura, los espías, el ejército, el telón de acero, la energía atómica, los cohetes espaciales o las conspiraciones mundiales. Son tantos los prejuicios hacia el comunismo que terminan por cansar al lector. Más allá de que los autores pretendan simplemente jugar con los clichés que ya en su día introdujo Tintín en el país de los soviets. ¿Homenaje o producto fallido? Queda a criterio del lector.
Pese a todo, y aunque algunos giros inesperados despistan, el álbum es bastante entretenido, y muy disfrutable gracias al excelente trabajo de Tarrin. Un cómic para leer como pura diversión, sin prejuicios.
Hay algún que otro huevo de pascua escondido entre sus páginas que no pasa desapercibido para los aficionados más avispados. Como una escena en la que vemos a Tomás el Gafe en su propia aventura; o las referencias al traje de botones de Spirou.
- Spirou y los soviets (Spirou chez les soviets)
- Fabrice Tarrin (dibujo) y Fred Neidhardt (guión)
- Traducción: Fabián Rodríguez Piastri
- Diseño y rotulación: Fernando Fuentes
- Dibbuks
- 2020
Utilidad didáctica de Spirou y Fantasio
Racismo
Tampoco Tome y Janry se quedaron al margen de las denuncias del racismo. Sobre todo en El Rayo Negro (1992), en el que un experimento de Champignac cambiará el color de algunos de sus ciudadanos; así como de Spirou y Fantasio. Una oportunidad de oro para lanzar un mensaje contrario a las posturas xenófobas.
Ciencia y tecnología en Spirou y Fantasio
La tecnología ha sido también otro de los temas a los que siempre han recurrido los distintos autores del universo de Spirou; aunque fueron Tome y Janry quienes apostaron con más fuerza por explotar las enormes posibilidades que les ofrecía la ciencia. Experimentos con monos que hablan (La voz sin amo, 1981); virus mortales que se transmiten a través del contacto (Virus, 1982); androides que cobran vida propia (¿Quién detendrá a Cianuro?, 1983); los viajes en el tiempo (El pasajero del tiempo, 1985 o El despertar de Z, 1986). Y por supuesto, Máquina que sueña, de 1998, en donde los autores se cuestionaron la propia existencia del protagonista; así como aprovecharon para lanzar un mensaje contrario al avance del progreso en detrimento de las personas.
No podemos olvidarnos tampoco de su aventura lunar. Spirou y Fantasio viajaron a la luna gracias a los planes de Zorglub en La cara oculta de Z, 2011, la segunda aventura de Yoann y Vehlmann. Una aventura en la que Spirou y Spip quedaron expuestos a los efectos de una lluvia solar, provocando una mutación temporal. Un álbum interesante también para el tema gravitacional, o la necesidad de buscar nuevos espacios para colonizar ante la contaminación de la Tierra.
P.D. Para hacer el presente artículo nos hemos valido en buena medida de la información que aparece en los integrales editados por la editorial Dibbuks.
El cuarto miembro de la «banda de los cuatro» que fundaban la escuela de Marcinelle era Will, no Peyo. Solo una cosita.
Gracias por la aclaración