Aloma. El tesoro del temerario

Aloma. El tesoro del temerario es el primer tomo de una trilogía de Alfonso Font que aborda el complicado mundo de las falsificaciones de arte. Una thriller policiaco con rasgos de Indiana Jones, y un fuerte componente de crítica social y política. Una obra que, salvando las distancias, nos recuerda a El tesoro del cisne negro de Paco Roca.

Alfonso Font es un autor clásico dentro del panorama español. Nació en Barcelona en 1946, y tras un breve paso por la Editorial Bruguera, entró a formar parte de Ediciones Toray. Y antes de darse cuenta, con apenas veinte años, ya estaba trabajando para los EEUU. Un autor muy prolífico, ya sea con guiones de otros, o con propios, que se dio a conocer en España gracias a sus colaboraciones para revistas como Creepy 0 1984. Su estilo bebe mucho de la influencia de Carlos Giménez, y entre sus obras más destacadas debemos destacar la reedición que Glenat hizo de muchas de sus mejores historias, como El as negro o Barcelona al alba.

Aloma es el nombre de la protagonista. Una chica joven, rebelde, impetuosa, intrépida y valiente. Una chica capaz de viajar por el mundo y desenvolverse, enamorarse, salir airosa de un tiroteo, o liberarse de sus captores. En el primero de los comics, Aloma se enfrascará en un viaje que le llevará hasta Panamá en busca del tesoro del antiguo galeón español El temerario. Pero no hará el viaje sola, sino que lo hará junto al detective privado Gerald Quer.

Se trata de un cómic fruto de una larga investigación. Y por difícil que parezca, buena parte de las irregularidades que se denuncian en la obra son reales. Tanto es así que el cómic puede ser interpretado como un cómic-denuncia. Llama la atención, por ejemplo, todo el asunto de las tarjetas standby como vehículo para blanquear dinero. O todo el negocio que existe detrás de las galerías de arte, y la venta de falsificaciones.

Como aspectos negativos, la construcción de los personajes y sus relaciones es demasiado apresurada, y de escasa profundidad. Y la trama, pese a los giros inesperados, es poco sorpresiva. Pero nada de esto resta a una lectura ligera, pero con una carga crítica muy profunda. Habrá que estar muy atento a los dos cómics que completan la trilogía.