Solas en Berlín es una historia de amistad en tiempos difíciles. La segunda guerra mundial está llegando a su fin para Alemania, y en la ciudad de Berlín se cruzan los caminos de dos mujeres bien distintas, pero que encontrarán un vínculo en común: sobrevivir en un mundo de hombres. Ambas están en bandos opuestos, de distintas generaciones, y con aspiraciones en la vida muy diferentes. Sin embargo, ambas encontrarán, la una en la otra, el consuelo y el apoyo necesario para sobrevivir el terrible tiempo que les ha tocado vivir. Son Ingrid y Eugeniya.
Solas en Berlín
Ingrid es una joven alemana de 28 años que trabajó como intérprete rusa de la Cruz Roja. Su marido se marchó a la guerra como parte de las SS y hace tiempo que no ha vuelto a saber e él. La guerra además, ha destruido su apartamento y se ha visto obligada a vivir en una habitación de una vecina. Pero no es caridad ni compasión, Ingrid se ve obligada a ofrecerse a todo tipo de hombres, especialmente soldados rusos, a cambio de que su casera reciba comida y regalos. Supervivencia y miedo se unen en el contexto de la guerra. A modo de refugio personal, Ingrid deja testimonio escrito en su diario.
Por su parte, Eugeniya es una joven rusa de 19 años que forma parte del NKVD (Comisariado del Pueblo para Asuntos Internos); es decir, la organización que se encarga de las funciones de seguridad y policiales, y que a su vez se encargó de gestionar la ocupación de Berlín por parte de las fuerzas rusas. Eugeniya es ingenua y sentimental, como le corresponde a alguien de su edad, pero también es fuerte y decidida. Como parte del NKVD recibe el extraño encargo de encontrar el cuerpo sin vida de Hitler. Aunque no parece que vaya a tener mucho éxito en su misión. Además, al igual que pasara con Ingrid, a Eugeniya le gusta documentar todos sus pasos, y dejar constancia de la documentación y testimonios que se va encontrando. Algo que por supuesto no gustará a sus mandos.
Dos mujeres en un mundo de hombres
Ingrid y Eugeniya, las protagonistas de Solas en Berlín, son en realidad dos mujeres atrapadas en un mundo de hombres. Dos mujeres de mundos distintos pero que encuentran la una en la otra un apoyo inesperado y que coge a ambas desprevenidas. Solas en Berlín es un cómic en donde se aborda asuntos de moral, remordimientos, mentiras, engaños y propaganda. Y de como la verdad se interpreta de modo diferente según desde el lado que se mire. Pero también es un cómic que nos permite ver el papel de la mujer en la guerra desde dos perspectivas diferentes.
Si te interesa el asunto de Alemania en torno a su memoria histórica os recomendamos las siguientes reseñas:
El autor de Solas en Berlín, Nicolas Juncker (1973), es historiador, profesor y dibujante. Y pese a que tiene obras anteriores, Solas en Berlín es el primer cómic que podemos leer en castellano. Se trata de un cómic basado en hechos reales. Al menos, la historia de sendos diarios encontrados durante la guerra es verídica. Se nota su vocación histórica. Es un cómic en el que vemos temas realmente interesantes relativos al papel ruso en la ocupación de Berlín, como por ejemplo el papel de las mujeres en el seno del Ejército Rojo, que eran tratadas como objeto sometidas a sus compañeros hombres.
Sin duda una lectura muy interesante de un tema complicado y del que pocas veces se escribe. El papel de las mujeres en los frentes de batalla. Esperamos poder volver a leer pronto obras de este autor.
- Solas en Berlín (Seules à Berlín)
- Nicolas Juncker
- Traducción: Montserrat Terrones
- Maquetación y rotulado: Francisca Cárcamo
- Corrección: Joana Castells
- Garbuix Books
- 2021
- 22,00€
